Los Cuatro Acuerdos (Cuarto y Último Acuerdo)
Y bien, con esta entrada se cierra el circulo con respecto al tema de los Cuatro Acuerdos.
El Dr. Ruiz propone que hay que hacer nuestro mejor esfuerzo en todo momento, eso creo que nos queda claro a todos, pero lo que hay que tomar en cuenta que en cada momento, en cada día, lo que mejor que podemos hacer puede variar, esto es por que cada día y en un mismo día podemos estar enojados, alegres, preocupados, tranquilos o angustiados. No es lo mismo estar frescos al despertar en la mañana, que en la noche después de vivir todo un día. No es lo mismo estar sobrio que ebrio, sano que enfermo, así que, según en el estado en el que estemos es como debemos hacer lo mejor que podamos.
Hacer lo mejor que podamos no es esforzarse demasiado, gastaremos mas energía de la necesaria que no te permitirá hacer lo mejor que podamos en el siguiente momento o día. El Dr. Ruiz dice: "Cuando te excedes, agotas tu cuerpo y vas contra ti, y por consiguiente te resulta mas difícil alcanzar tus objetivos. Por otro lado, si haces menos de lo que puedes hacer, te sometes a ti mismo a frustraciones, juicios, culpas y reproches"
Al hacer lo mejor que podamos, de manera de equilibrar el no excedernos y el no hacer lo que debemos, podemos llegar a ser felices, emprendiendo las acciones que debemos realizar. Sabiendo que estamos haciendo lo que .
A mi, este acuerdo me deja mucho en que pensar, quizás este acuerdo sea la clave que muchos necesitamos para encontrar lo que nos deje satisfacción entre tantas actividades que hay que realizar diariamente, el trabajo, la familia, el crecimiento personal. Es un acuerdo tan simple, tan claro para la mayoría, pero que a veces no estamos muy conscientes si realmente lo estamos realizando o no.
Y así, aquí acaban Los Cuatro Acuerdos, la próxima semana llegará otra frase a desarrollar. Que su semana sea lo máximo que puedan lograr.
Fuente:
Libro: "Los Cuatro Acuerdos" Autor: Miguel Ruiz. Ed. Urano.
domingo, 31 de enero de 2010
domingo, 24 de enero de 2010
No hagas suposiciones.
Los Cuatro Acuerdos. (Tercer acuerdo)
Estoy muy contenta de que ya empiezan a llegar comentarios, todavía me comentan que hay quienes no han podido colocar alguno, si alguien me puede decir que estoy haciendo mal, sera bienvenido su consejo, bueno, empecemos a lo que venimos.
Don Miguel Ruiz nos dice: "Tendemos a hacer suposiciones sobre todo. El problema es que, al hacerlo, creemos que lo que suponemos es cierto. Juraríamos que es real. Hacemos suposiciones sobre lo que los demás hacen o piensan -nos lo tomamos personalmente-, y después, los culpamos y reaccionamos enviando veneno emocional con nuestras palabras".
Este es un modo muy común de vivir, lo aprendimos totalmente de nuestros padres, de nuestros amigos, y lo hemos reforzado con nuestra pareja y nuestros hijos.
Pondré un ejemplo: Un día una señora se quejaba de que su marido la gran parte de las veces ocupaba la misma chamarra, su queja era, que la gente "pensaba" que ella era una mala esposa y no tenia preparadas (lavadas y planchadas) suficientes chamarras para que su marido las fuera cambiando con los días. Yo le dije: "No podemos saber lo que la gente piensa..." se quedo callada un momentito y ella me respondió muy segura de sí, "Pero yo si se lo que la gente piensa".
Ahí es donde las suposiciones empiezan, creemos saber "lo que la gente piensa", creemos saber los motivos por los cuales realizaron lo que realizaron, pero, primero, es imposible estar en la mente de la otra persona, hasta la fecha, no existe un equipo, un programa, una técnica que nos permita entrar en la mente del otro, mucho menos, algo así como magia que nos hace "leer" los pensamientos del otro.
Nuevamente, citando al Dr. Ruíz: "Literalmente, inventamos las cosas en nuestra imaginación". Todo el tiempo estamos creando historias, ante un evento, consecutivamente hacemos una gran historia, si alguien no ha llegado a un lugar, ya lo estamos haciendo atropellado, chocado, pensamos si se desmayo en su casa antes de salir, si no imaginamos cosas de ese estilo, entonces pensamos que es un gran desconsiderado por hacernos esperar (y empezamos a tomarnos las cosas personalmente).
El caso mas común es que en pareja, damos por hecho que el otro como "nos conoce" sabe lo que pensamos, y debe estar en sintonía con lo que queremos, incluso, adelantarse a nuestros deseos, alguna vez me comentaban del caso de una señora que se enojaba con su marido por que cuando la veía estar ocupada cocinando, el no detectaba que hacia falta cambiar el garrafón y ella aseguraba que el debía ser mas atento y cambiarlo, el le respondió, sorprendido a la increpación de su mujer, que ¡nunca se lo había pedido!
Suponemos también que todos viven la vida igual que nosotros, que te tienen los mismos horarios de comida, de levantarse, de higiene, pero no es así, se nos olvida que hay familias mas ligeras en sus normas y otras mas estrictas, y no todos van a llevar su vida igual que nosotros.
Bueno, pero esto de la "suponedera", debe tener una solución, y la hay, para dejar de suponer, hay que "preguntar".
Si suponemos algo, no dejemos que nuestra mente se quede dando vueltas, hay que preguntar, claro que eso implica un gran riesgo, pues probablemente, no queremos saber lo que realmente la otra persona piensa, a veces, es mas cómodo quedarnos con nuestra historia imaginaria.
También hay otra opción, a veces, ya no podemos preguntar por que la persona hizo lo que hizo, por que ya no está a nuestro alcance, debemos asumir que no tendremos la respuesta y aceptar las cosas tal cual ocurrieron.
Esto es solo una leve idea de lo que expone el Dr. Ruiz, lo mejor, es que lean su libro.
Les mando como siempre un gran abrazo y que tengan una excelente semana.
Fuentes:
Libro: Los cuatro Acuerdos. Aut. Dr. Miguel Ruiz. Ed. Urano.
Frases Relacionadas:
Uno no sabe lo que ve, uno ve lo que uno sabe.
Estoy muy contenta de que ya empiezan a llegar comentarios, todavía me comentan que hay quienes no han podido colocar alguno, si alguien me puede decir que estoy haciendo mal, sera bienvenido su consejo, bueno, empecemos a lo que venimos.
Don Miguel Ruiz nos dice: "Tendemos a hacer suposiciones sobre todo. El problema es que, al hacerlo, creemos que lo que suponemos es cierto. Juraríamos que es real. Hacemos suposiciones sobre lo que los demás hacen o piensan -nos lo tomamos personalmente-, y después, los culpamos y reaccionamos enviando veneno emocional con nuestras palabras".
Este es un modo muy común de vivir, lo aprendimos totalmente de nuestros padres, de nuestros amigos, y lo hemos reforzado con nuestra pareja y nuestros hijos.
Pondré un ejemplo: Un día una señora se quejaba de que su marido la gran parte de las veces ocupaba la misma chamarra, su queja era, que la gente "pensaba" que ella era una mala esposa y no tenia preparadas (lavadas y planchadas) suficientes chamarras para que su marido las fuera cambiando con los días. Yo le dije: "No podemos saber lo que la gente piensa..." se quedo callada un momentito y ella me respondió muy segura de sí, "Pero yo si se lo que la gente piensa".
Ahí es donde las suposiciones empiezan, creemos saber "lo que la gente piensa", creemos saber los motivos por los cuales realizaron lo que realizaron, pero, primero, es imposible estar en la mente de la otra persona, hasta la fecha, no existe un equipo, un programa, una técnica que nos permita entrar en la mente del otro, mucho menos, algo así como magia que nos hace "leer" los pensamientos del otro.
Nuevamente, citando al Dr. Ruíz: "Literalmente, inventamos las cosas en nuestra imaginación". Todo el tiempo estamos creando historias, ante un evento, consecutivamente hacemos una gran historia, si alguien no ha llegado a un lugar, ya lo estamos haciendo atropellado, chocado, pensamos si se desmayo en su casa antes de salir, si no imaginamos cosas de ese estilo, entonces pensamos que es un gran desconsiderado por hacernos esperar (y empezamos a tomarnos las cosas personalmente).
El caso mas común es que en pareja, damos por hecho que el otro como "nos conoce" sabe lo que pensamos, y debe estar en sintonía con lo que queremos, incluso, adelantarse a nuestros deseos, alguna vez me comentaban del caso de una señora que se enojaba con su marido por que cuando la veía estar ocupada cocinando, el no detectaba que hacia falta cambiar el garrafón y ella aseguraba que el debía ser mas atento y cambiarlo, el le respondió, sorprendido a la increpación de su mujer, que ¡nunca se lo había pedido!
Suponemos también que todos viven la vida igual que nosotros, que te tienen los mismos horarios de comida, de levantarse, de higiene, pero no es así, se nos olvida que hay familias mas ligeras en sus normas y otras mas estrictas, y no todos van a llevar su vida igual que nosotros.
Bueno, pero esto de la "suponedera", debe tener una solución, y la hay, para dejar de suponer, hay que "preguntar".
Si suponemos algo, no dejemos que nuestra mente se quede dando vueltas, hay que preguntar, claro que eso implica un gran riesgo, pues probablemente, no queremos saber lo que realmente la otra persona piensa, a veces, es mas cómodo quedarnos con nuestra historia imaginaria.
También hay otra opción, a veces, ya no podemos preguntar por que la persona hizo lo que hizo, por que ya no está a nuestro alcance, debemos asumir que no tendremos la respuesta y aceptar las cosas tal cual ocurrieron.
Esto es solo una leve idea de lo que expone el Dr. Ruiz, lo mejor, es que lean su libro.
Les mando como siempre un gran abrazo y que tengan una excelente semana.
Fuentes:
Libro: Los cuatro Acuerdos. Aut. Dr. Miguel Ruiz. Ed. Urano.
Frases Relacionadas:
Uno no sabe lo que ve, uno ve lo que uno sabe.
domingo, 17 de enero de 2010
No te tomes nada personalmente.
Los Cuatro Acuerdos (Segundo Acuerdo)
Sigue haciendo frío, pero va mejorando, por lo menos aquí en mi ciudad. Pero esto del clima gélido no es nada en comparación al lamentable sufrimiento que esta viviendo el pueblo de Haití. Desde aquí mando mi mas sincero pesar por la enorme tragedia que se les presentó y los acompaño moralmente en su dolor. Y a todos los lectores, ojalá encontremos formas adecuadas para poder ayudarlos por que me parece que requerirá una gran reconstrucción de su país.
Ahora regresemos al tema que nos ocupa, hoy tocaremos el Segundo Acuerdo que nos propone el Dr. Ruíz: No te tomes nada personalmente.
La semana pasada omití mencionarles como llegaron los acuerdos a mi, yo había recibido anteriormente alguna presentación de Power Point por un e-mail y me parecieron muy buenos y me habían recomendado el libro. Justo estaba por comprarlo cuando Leonardo el padre de mi hija me lo prestó, esto fue a las pocas semanas de nuestra separación y lo leí, me gusto mucho todo lo que aprendí de ahí. Fue curioso la manera en que llegó, pero me permitió profundizar en lo que propone cada frase que encierra los acuerdos.
El Dr. Ruiz dice: "Los tres acuerdos siguientes nacen, en realidad, del primero. El Segundo Acuerdo consiste en no tomarte nada personalmente. Suceda lo que suceda a tu alrededor, no te lo tomes personalmente".
Esto me hace recordar nuevamente a mi amigo Lázaro, cuando alguna vez me quejaba de que Leonardo me hablaba fuerte, aspero, rudo y grosero, Lázaro me dijo, no has pensado que no es que te hable a ti así exclusivamente, sino que, así habla en todo momento, lo reflexioné y era cierto, en muchas circunstancias y con muchas personas era así y no era "exclusivamente" gritón conmigo.
Eso es un ejemplo de una persona que me conoce, pero cuando alguien no nos conoce y nos dice "estúpido", ni modo que esa persona tenga poderes mentales para saber que somos estúpidos, esa persona habla desde lo que tiene en su mente y en su corazón.
Uno solo puede ver las cosas de acuerdo a sus esquemas de pensamiento. Cuando los españoles llegaron a América, los nativos no vieron unas naves españolas acercándose, por que eso no estaba en su nivel interpretativo, ellos vieron unas islas flotantes por que las islas era algo que ellos conocían. De igual manera, las personas nos dicen las cosas de acuerdo a lo que tienen dentro.
También el Dr. Ruiz nos propone que tampoco lo positivo lo tomemos personalmente, uno sabe lo bueno que uno es y no es necesario que alguien nos lo diga.
Mi amigo Chuchito Sánchez me decía que para el solo existen tres acuerdos, por que hay que hay cosas que deben tomarse personalmente, el mencionaba, si alguien te dice "te quiero" deberías tomarlo personalmente. Tratando de concordar con lo anterior, tampoco debemos tomarnos un "te quiero" personalmente, por que ese "te quiero" refleja los sentimientos (que hay que recordar que los sentimientos y las emociones surgen de nuestra mente) y si una persona quiere que tomemos eso personalmente, posiblemente espera de nosotros una respuesta, positiva o negativa, una respuesta que cubra sus necesidades, pero nosotros nunca estamos obligados a una respuesta, ni interna ni externa.
Hice unos pequeños cambios al blog, según entiendo, ya pueden escribir todos comentarios en el, así que, ojalá se animen a contarme lo que les parece esta entrada o las anteriores.
Les mando un grandioso abrazo.
Fuentes:
Opiniones que me ofreció mi hermana Martha y que sin ellas no podría haber complementado las ideas de este acuerdo.
Libro: Los Cuatro Acuerdos. Dr. Miguel Ruiz. Ed. Urano.
Frases Relacionadas:
El que se afecta por un insulto, se infecta.
Sigue haciendo frío, pero va mejorando, por lo menos aquí en mi ciudad. Pero esto del clima gélido no es nada en comparación al lamentable sufrimiento que esta viviendo el pueblo de Haití. Desde aquí mando mi mas sincero pesar por la enorme tragedia que se les presentó y los acompaño moralmente en su dolor. Y a todos los lectores, ojalá encontremos formas adecuadas para poder ayudarlos por que me parece que requerirá una gran reconstrucción de su país.
Ahora regresemos al tema que nos ocupa, hoy tocaremos el Segundo Acuerdo que nos propone el Dr. Ruíz: No te tomes nada personalmente.
La semana pasada omití mencionarles como llegaron los acuerdos a mi, yo había recibido anteriormente alguna presentación de Power Point por un e-mail y me parecieron muy buenos y me habían recomendado el libro. Justo estaba por comprarlo cuando Leonardo el padre de mi hija me lo prestó, esto fue a las pocas semanas de nuestra separación y lo leí, me gusto mucho todo lo que aprendí de ahí. Fue curioso la manera en que llegó, pero me permitió profundizar en lo que propone cada frase que encierra los acuerdos.
El Dr. Ruiz dice: "Los tres acuerdos siguientes nacen, en realidad, del primero. El Segundo Acuerdo consiste en no tomarte nada personalmente. Suceda lo que suceda a tu alrededor, no te lo tomes personalmente".
Esto me hace recordar nuevamente a mi amigo Lázaro, cuando alguna vez me quejaba de que Leonardo me hablaba fuerte, aspero, rudo y grosero, Lázaro me dijo, no has pensado que no es que te hable a ti así exclusivamente, sino que, así habla en todo momento, lo reflexioné y era cierto, en muchas circunstancias y con muchas personas era así y no era "exclusivamente" gritón conmigo.
Eso es un ejemplo de una persona que me conoce, pero cuando alguien no nos conoce y nos dice "estúpido", ni modo que esa persona tenga poderes mentales para saber que somos estúpidos, esa persona habla desde lo que tiene en su mente y en su corazón.
Uno solo puede ver las cosas de acuerdo a sus esquemas de pensamiento. Cuando los españoles llegaron a América, los nativos no vieron unas naves españolas acercándose, por que eso no estaba en su nivel interpretativo, ellos vieron unas islas flotantes por que las islas era algo que ellos conocían. De igual manera, las personas nos dicen las cosas de acuerdo a lo que tienen dentro.
También el Dr. Ruiz nos propone que tampoco lo positivo lo tomemos personalmente, uno sabe lo bueno que uno es y no es necesario que alguien nos lo diga.
Mi amigo Chuchito Sánchez me decía que para el solo existen tres acuerdos, por que hay que hay cosas que deben tomarse personalmente, el mencionaba, si alguien te dice "te quiero" deberías tomarlo personalmente. Tratando de concordar con lo anterior, tampoco debemos tomarnos un "te quiero" personalmente, por que ese "te quiero" refleja los sentimientos (que hay que recordar que los sentimientos y las emociones surgen de nuestra mente) y si una persona quiere que tomemos eso personalmente, posiblemente espera de nosotros una respuesta, positiva o negativa, una respuesta que cubra sus necesidades, pero nosotros nunca estamos obligados a una respuesta, ni interna ni externa.
Hice unos pequeños cambios al blog, según entiendo, ya pueden escribir todos comentarios en el, así que, ojalá se animen a contarme lo que les parece esta entrada o las anteriores.
Les mando un grandioso abrazo.
Fuentes:
Opiniones que me ofreció mi hermana Martha y que sin ellas no podría haber complementado las ideas de este acuerdo.
Libro: Los Cuatro Acuerdos. Dr. Miguel Ruiz. Ed. Urano.
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El que se afecta por un insulto, se infecta.
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Miguel Ruiz
domingo, 10 de enero de 2010
Se impecable con tus palabras
Los Cuatro Acuerdos. (Primer Acuerdo)
¡Que calor! Calor humano estamos viviendo. Este fin de semana por lo menos para los oriundos de la ciudad de Puebla en México si que nos las vimos muy duras con respecto al frío, pero, al final como todo, es temporal.
Hoy con mucho respeto quiero hablar de la frase del Dr. Miguel Ruiz generada de su multivendido libro "Los Cuatro Acuerdos" (que personalmente les recomiendo mucho lo lean) y no quisiera escribir algo que suene a copia o a intento de mejora de lo que el ha explicado, pero si me gustaría hablar de cosas relacionadas a esta frase.
El Dr. Ruiz dice que es el acuerdo mas importante pero también el más difícil de cumplir, y es muy cierto, constantemente de nuestra boca salen cualquier cantidad de palabras de las que no tomamos la mayor conciencia y que no pensamos en las consecuencias de las mismas.
Retomando a mis ejemplos relacionados con los hijos, es tan común que sin darnos cuenta les digamos algún adjetivo que los denigre, desde cosas graciosas como pulga, pollo, chango, hasta cosas que pueden resultar hirientes como gordo, feo, tonto, o cuando les aseguramos que no van a lograr lo que se propongan o que eso que quieren no es para ellos; esas cosas que les decimos los van a dejar marcados en su personalidad toda su vida.
La Psicología y la Psiquiatría han estudiado como afectan bioquímicamente al cerebro recibir estas palabras y como van dejando su huella en el mismo, así que el malestar, la tristeza e incluso el abandono que podemos sentir por esas palabras deja huella bioquímica en el mismo y como el cerebro rije todo el cuerpo, también dejará su huella en los demás órganos con un montón de padecimientos futuros.
También cuando no cuidamos nuestras palabras y las deshonramos, usándolas para inventar un cuento sobre alguien, a veces, solo por que alguien nos lo contó, o solo por que suponemos que así debiera ser, y en este caso, dañar su prestigio en un grupo social, familiar, de trabajo, etc.
Y podemos mencionar mas ángulos, pero siempre es importante mencionar que lo primero que debemos cuidar es lo que sale de nuestra boca, ya que sin duda, es un reflejo de nosotros mismos, de los que habita en nuestra mente y por supuesto en nuestro corazón.
Un gran abrazo caluroso.
Fuentes
Libro: "Los Cuatro Acuerdos". Dr. Miguel Ruíz.
Frases Relacionadas:
Que tus palabras sean mejor que tu silencio.
¡Que calor! Calor humano estamos viviendo. Este fin de semana por lo menos para los oriundos de la ciudad de Puebla en México si que nos las vimos muy duras con respecto al frío, pero, al final como todo, es temporal.
Hoy con mucho respeto quiero hablar de la frase del Dr. Miguel Ruiz generada de su multivendido libro "Los Cuatro Acuerdos" (que personalmente les recomiendo mucho lo lean) y no quisiera escribir algo que suene a copia o a intento de mejora de lo que el ha explicado, pero si me gustaría hablar de cosas relacionadas a esta frase.
El Dr. Ruiz dice que es el acuerdo mas importante pero también el más difícil de cumplir, y es muy cierto, constantemente de nuestra boca salen cualquier cantidad de palabras de las que no tomamos la mayor conciencia y que no pensamos en las consecuencias de las mismas.
Retomando a mis ejemplos relacionados con los hijos, es tan común que sin darnos cuenta les digamos algún adjetivo que los denigre, desde cosas graciosas como pulga, pollo, chango, hasta cosas que pueden resultar hirientes como gordo, feo, tonto, o cuando les aseguramos que no van a lograr lo que se propongan o que eso que quieren no es para ellos; esas cosas que les decimos los van a dejar marcados en su personalidad toda su vida.
La Psicología y la Psiquiatría han estudiado como afectan bioquímicamente al cerebro recibir estas palabras y como van dejando su huella en el mismo, así que el malestar, la tristeza e incluso el abandono que podemos sentir por esas palabras deja huella bioquímica en el mismo y como el cerebro rije todo el cuerpo, también dejará su huella en los demás órganos con un montón de padecimientos futuros.
También cuando no cuidamos nuestras palabras y las deshonramos, usándolas para inventar un cuento sobre alguien, a veces, solo por que alguien nos lo contó, o solo por que suponemos que así debiera ser, y en este caso, dañar su prestigio en un grupo social, familiar, de trabajo, etc.
Y podemos mencionar mas ángulos, pero siempre es importante mencionar que lo primero que debemos cuidar es lo que sale de nuestra boca, ya que sin duda, es un reflejo de nosotros mismos, de los que habita en nuestra mente y por supuesto en nuestro corazón.
Un gran abrazo caluroso.
Fuentes
Libro: "Los Cuatro Acuerdos". Dr. Miguel Ruíz.
Frases Relacionadas:
Que tus palabras sean mejor que tu silencio.
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domingo, 3 de enero de 2010
Las personas prosperan más cuando hay desafíos en su medio ambiente.

(Foto de Enric Sala, tomada de http://ocean.nationalgeographic.com)
Una historia para pensar.
2010, quien iba a imaginarse que ya pasaron 10 años de que iniciamos el siglo y todas las cosas que hemos vivido. Que bueno que tenemos la oportunidad tanto de que yo les pueda compartir algo, así como ustedes de leerlo.
La entrada del blog de esta ocasión es sobre un mail que me mando mi hermana, pues pensó que esto podría servirme para mi crecimiento y vaya que si ha sido útil. Así pues, trascribiré lo enviado por ella para pasarlo ahora a ustedes y les pueda reflejar algo en sus vidas, en especial en este año que empieza.
INICIO: Los Japoneses siempre han gustado del pescado fresco. Pero las aguas cercanas al Japón no han tenido muchos peces por décadas. Así que para alimentar a la población japonesa, los barcos pesqueros fueron fabricados más grandes para ir mar adentro. Mientras más lejos iban los pescadores más era el tiempo que les tomaba regresar a entregar el pescado. Si el viaje tomaba varios días, el pescado ya no estaba fresco.
Para resolver el problema, las compañias instalaron congeladores en los barcos, así podían pescar y poner los pescados en los congeladores. Sin embargo, los japoneses pudieron percibir la diferencia entre el pescado congelado y el fresco, y no les gustaba el congelado, que, por lo tanto, tenían que vender mas barato.
Las compañias instalaron entonces en los barcos tanques para los peces. Podían así pescar a los peces, meterlos en los tanques y mantenerlos vivos hasta llevarlos a la costa. Pero después de un tiempo los peces dejaban de moverse en el tanque. Estaban aburridos y cansados, aunque vivos.
Los consumidores japoneses también notaron la diferencia del sabor por que cuando los peces dejan de moverse por días, pierden el sabor fresco.
Y ¿como resolvieron el problema las compañias japonesas?, ¿como consiguieron traer pescado con sabor de pescado fresco? Si las compañias japonesas te pidieran asesoría, ¿qué les recomendarías?
Mientras piensas en la solución... Lee lo siguiente:
Tan pronto como una persona alcanza sus metas, tales como empezar una nueva empresa, pagar sus deudas, encontrar una pareja maravillosa, o lo que sea, empieza a perder la pasión. Ya no necesitará esforzarse tanto. Así que solo se relaja. Experimentan el mismo problema que las personas que ganan la lotería, o quienes heredan mucho dinero y nunca maduran, o de quienes se quedan en casa y se hacen adictos a los medicamentos para la depresión o la ansiedad.
Como el problema de los pescadores japoneses, la solución es sencilla.
Lo dijo L. Ron Hubbard a principios de los años 50:
"Las personas prosperan más cuando hay desafíos en su medio ambiente"("Man Thrives, oddly enough, only in the precence of a challenging environment" investigué que realmente fuera de él.)
Para mantener el sabor fresco de los peces, las compañias pesqueras ponen a los peces dentro de los tanques en los botes, pero ahora ponen también ¡Un Tiburón Pequeño!, claro que el tiburón se come algunos peces, pero los demás llegan muy, pero muy vivos. ¡Los peces son desafiados! Tienen que nadar durante todo el trayecto dentro del tanque ¡Para mantenerse vivos!.
Cuando alcances tus metas proponte otras mayores. Nunca debes crear el éxito para luego acostarte en él. Así que, invita un tiburón a tu tanque, y descubre que tan lejos puedes llegar. Unos cuantos tiburones te harán conocer tu potencial para seguir vivo y haciendo lo que mejor haces de la mejor manera posible.
Y si ya los encuentras en tu tanque, déjalos que se muerdan entre sí, que no te asusten sus dientes ni sus trampas... tu sigue alerta, pero siempre "Fresco".
Siempre habrá tiburones a donde vayas... (Y si no los hay... búscalos.) FIN.
Ya llegó el 2010 y tenemos muchas expectativas, pero hay tantas cosas que no sabemos que nos van a pasar. Pero hay cosas que sabemos nos tienen como aburridos, chocados, en esas en especial, invitemos un tiburón que nos desafíe a estar mejor.
Les mando un gran abrazo.
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